Entre el bullicio de la música que mengua, una luz tenue que rompe con la claridad, una pantalla, un ordenador y un micrófono. Suenan los vasos y los botellines al posarse en la mesa, los hielos caen sobre el cristal, alguien pide una pinta mientras a lo lejos se escucha hablar sobre ciencia. Algunos acudieron a la cita de Pint of science en Algeciras, otros se encontraron con ella.

La ciudad del Campo de Gibraltar se convirtió ayer en una de las 42 sedes nacionales del festival internacional que reúne a investigadores y a ciudadanos de a pie en los bares para hablar de ciencia. Es uno de los programas de divulgación científica con mayor poder de convocatoria de España.

Los pubs de la calle Trafalgar Sixties e Ipanema abrieron sus puertas a esta iniciativa, que se estrenó en Algeciras y que continuará hoy y mañana con más charlas científicas a partir de las 19:00. La ciudad se sumó a una actividad que se celebraba de manera sincronizada en nueve países: Reino Unido, Francia, Italia, Australia, Brasil, Canadá, Alemania, Irlanda y, por tercer año consecutivo en España.

En Ipanema José Lucas Pérez, catedrático de la Facultad de Ciencias del Mar y Ambientales de Cádiz, centró su charla en las algas y los mitos sobre si son comestibles. El planeta azul está cubierto por océanos y mares en sus tres cuartas partes y una de las grandes incógnitas la constituyen las algas o "verduras de mar". Ezequiel Andréu Cazalla, del Instituto de Estudios Campogibraltareños, tomó el testigo de la segunda charla analizando el origen del Estrecho de Gibraltar hasta resultar la fisonomía que se conoce en la actualidad, el por qué de la presencia de estas especies de cetáceos en un medio relativamente hostil como el Estrecho.

Frente a frente, en el pub Sixties también afloraban las charlas de interés, en este caso la profesora de la UNED y concejal de Cultura, Pilar Pintor, habló de la evolución del gusto artístico a través del comentario de diferentes obras de Arte, principalmente pictóricas, analizando la evolución de la tradición academicista hacia las nuevas vanguardias, a partir del siglo XX.

Acto seguido, en Sixties, tomó la palabra el director del IECG, Ángel Sáez, que ofreció a los presentes un paseo por la Isla de las Palomas de Tarifa, situada en la unión del Mediterráneo con el Atlántico, dando una mirada interdisciplinar a la joya del Parque Natural del Estrecho.