Cinco derrotas consecutivas eran algo inusual en la trayectoria del Algeciras CF en Primera Federación, categoría en la que milita desde su creación y en la que seguirá estando la próxima temporada. Una vez logrado el triunfo frente al Atlético Baleares el pasado domingo, y aunque la salvación matemática no se confirmó hasta el empate del Linares Deportivo, ya sobre las diez de la noche del mismo día, técnicos y jugadores se abrieron a ofrecer algunas de las razones que hicieron larga la espera de un triunfo muy deseado y a valorar lo conseguido.

El entrenador albirrojo, Lolo Escobar, declaró el viernes, antes del choque contra los baleares, que él tiene muchas explicaciones para justificar el comportamiento de un equipo, el que dirige, que había llegado a consumirse con seis partidos en los que no había ganado, cinco de ellos con derrota.

La gran razón, según Escobar, es el desahogo de llegar a los 42, que en realidad llegaron con el empate frente al Málaga, en la jornada 29, el 23 de marzo, cuando faltaban ocho jornadas todavía para el final. El símil que utilizó fue el del tenista con varias bolas de partido que no termina de ver el final, y acaba siendo presa del vértigo.

Hay otras muchas explicaciones, "muchas", cómo dijo el técnico extremeño: "Algunas tienen que ver conmigo, otras con los jugadores y otras tienen que ver con el club". La incógnita es si desvelará todas en algún momento.

Iván Turrillo

El más claro, una vez más, fue el capitán Iván Turrillo, un hombre que cómo él mismo destacó lleva saltando al campo de fútbol desde que tiene siete años con la misma camiseta. Su pensamiento es sencillo y está demostrado en la historia: "Somos el Algeciras. No tenemos cien trabajadores, ni somos el Castellón, ni el Málaga, ni el Ceuta - que en todas las competiciones hay tapados -. Los presupuestos, a la larga, te sitúan en una parte u otra. Nosotros, como plantilla, el objetivo era no sufrir, y hemos logrado la permanencia a tres jornadas del final. Hay que ser realistas, que somos el Algeciras".

Es el colofón después de una victoria, después de alcanzar los 45 puntos, lo que suele ser la voz del vestuario cuando ya se ha logrado un objetivo deseado y perseguido a lo largo de la temporada. Es el fruto de la veteranía y del compromiso demostrado en muchas ocasiones, tantas como en 480 convocatorias con el Algeciras.

Esa voz, respetada, la proyectó también Turrillo en su encuentro con los medios de comunicación tras el partido con el Atlético Baleares para expresar un lamento y una llamada de atención. Le molestó mucho "escuchar opiniones, escuchando a algunos aficionados en un gimnasio, que había jugadores que podían estar dejándose perder". 

Explicó porque contaba lo vivido en persona: "Lo digo para que a la gente no se le vaya la cabeza. Si lo dicen en una reunión familiar de cuatro personas, pues vale, no lo deben decir aquí, con 4000 personas. ¿Cómo nos vamos a dejar perder?".