La Bodega de Mora de Osborne ha acogido en la tarde de este jueves la presentación del cartel de la Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino de El Puerto, obra de la cartelista sevillana Nuria Barrera Bellido.

El encargado de abrir el acto fue el pianista y cantante Germán Morales, que interpretó la sevillana Yo soy del sur, con Araceli Arias y Javier Sánchez Soriano al baile.

El encargado de hacer de maestro de ceremonias fue el concejal de Fiestas, David Calleja, quien dio paso al consejero delegado de Osborne para la presentación de la edición número XVI de la media botella de Fino Quinta para la Feria de El Puerto 2024, con una etiqueta diseñada por Ximena Maier y dedicada a la historia de la fiesta portuense, a través de sus distintas ubicaciones desde mediados de los años 40 del pasado siglo, cuando se ubicada en el Paseo de La Victoria, hasta el actual recinto de Las Banderas pasando por Crevillet.

Fernando Terry, junto a la botella de Fino Quinta de este año.

Fernando Terry Osborne presentó la edición especial de la media botella y leyó unas palabras de la diseñadora, que no pudo asistir al acto de presentación.

David Calleja se mostró muy emocionado al presentar el cartel, en el que ha trabajado mano a mano junto a la autora, aportando ideas y consensuando todos los detalles.

Calleja comparó el cartel con otros que han sido icónicos, como el de Juan Lara en 1989, destacando también el del pasado año, obra de Adrián Ferreras. Así, el edil considera que más que la Feria lo que dota de identidad a un cartel es cuánto represente a la ciudad, por lo que si en el caso de Juan Lara el río Guadalete fue el protagonista, y las casas palacio en el cartel de Ferreras, en esta ocasión el protagonista indiscutible es un patio que alberga los prolegómenos de un día de Feria.

Como explicó Calleja la autora pintó en principio un patio clásico portuense y a partir de ese escenario se le fueron añadiendo detalles. “Es la mejor cartelista de Andalucía, la admiro y la estimo”, dijo de Nuria Barrera, destacando su habilidad a la hora de plasmar las tradiciones. “Con la Feria recuperamos también parte de nuestra historia, y estoy deseando compartir el cartel con vosotros”, dijo el concejal dirigiéndose al público asistente.

Acto seguido subieron al escenario el alcalde, Germán Beardo, y la autora del cartel, que descubrieron en primer lugar el cuadro original, no sin cierta dificultad en el lado que le tocó a Beardo, al que se le enganchó ligeramente el paño que cubría el cartel.Posteriormente ambos descubrieron el cartel propiamente dicho, que se encontraba tapado con un mantón de color rojo.

Nuria Barrera confesó que para ella es “un honor estar en esta tierra, donde la brisa del mar se mezcla con el aroma de esta bodega”.

La autora señaló el importante trabajo de documentación realizado para confeccionar el cartel, “con Calleja de la mano”.

El cartel se estructura en tres planos, como explicó su autora. En el primero se destaca la arquitectura de un patio portuense, en un segundo plano, en un banco de azulejos, se aportan los principales datos de esta edición y en el centro de la imagen se recrea la espera de una gitana momentos antes de ir a la Feria, con una copa de fino y detalles como las plantas típicas de los patios, los trajes tendidos y mantones de varios colores.

Araceli Arias y Javier Sánchez Soriano, bailando unas sevillanas.

En la escena predomina el color rojo, que significa calor, vitalidad, energía y alegría, y están muy presentes también la historia y las devociones, a través de varios detalles como los lebrillos, las esculturas o imágenes como la Virgen del Carmen o San José. También como guiño a la ciudad homenajeada este año, Estepona, hay una orquídea, en honor al parque botánico ubicado en esta localidad malagueña.

Al fondo del cartel, ya en tercer plano, está la Feria con elementos como la noria, el paseo de caballos y las casetas.

El alcalde fue el encargado de cerrar el acto, felicitando a la autora y destacando la labor de su concejal de Fiestas.

El broche de oro lo pusieron otras sevillanas, en las que Calleja no se pudo resistir y salió a bailar las dos últimas.