El Manchester-62, de la Gibraltar Football League, ha anunciado una inversión de de 20 millones de dólares para constituirse en “líder mundial” en la financiación de investigaciones sobre conmoción cerebral y encefalopatía traumática crónica en el fútbol.

El Manchester 62 encabeza los esfuerzos para aumentar el uso de cascos protectores en el fútbol con el fin de reducir el impacto a largo plazo de los golpes en la cabeza y las colisiones, que están relacionados con la encefalopatía traumática crónica (CTE por sus siglas en inglés), una enfermedad degenerativa documentada en atletas que practican deportes de contacto como lo son el boxeo, el fútbol americano, el rugby y, cada vez más, el fútbol, informa la GBC.

El presidente del club, Michael Monsour, que tiene experiencia en cuidados de la memoria y la vida de personas mayores, califica la ETC y las conmociones cerebrales como "la mayor epidemia del deporte".

Monsour cree que esta inversión ayudará a difundir la conciencia sobre el problema y permitirá que el club que encabeza esté a la vanguardia de investigación que espera que influya en los órganos rectores para que tomen medidas para proteger a los jugadores.

La entidad deportiva se ha asociado con la Concussion Legacy Foundation y el año pasado se convirtió en el primer equipo de la máxima categoría de Europa en presentar un equipo completo en el que todos los jugadores de campo llevaban cintas protectoras.

Los detalles de la inversión de la firma estadounidense de capital privado Monstranamus aún no se han hecho públicos. El acuerdo se presentará ahora a la asociación de fútbol y estará sujeto al proceso de diligencia debida de la Federación de Gibraltar (GFA) antes de ser ratificado.

La encefalopatía traumática crónica es daño cerebral permanente causado por lesiones cerebrales traumáticas repetidas, como conmociones. Una conmoción es una lesión que causa que el cerebro golpee el cráneo. El tejido cerebral se daña, lo que provoca síntomas como dolor de cabeza, mareos o pitidos en los oídos. Una lesión cerebral que no provoca síntomas se denomina impacto subconcuso. Las lesiones cerebrales traumáticas repetidas hacen que con el tiempo se formen ciertas proteínas que impiden que el cerebro funcione correctamente.