CCOO ha animado a las partes negociadoras del tratado sobre Gibraltar -la Comisión Europea y Reino Unido- a fijar una fecha a la firma de un acuerdo que debe "poner fin a la situación de incertidumbre que padecen miles de personas trabajadoras del Campo de Gibraltar". El sindicato rechaza "los intentos de algunos interlocutores políticos de poner piedras en el camino del acuerdo en lo que consideran un desprecio a los intereses de la ciudadanía", en referencia a la entrevista realizada por Europa Sur al ex ministro de Exteriores y eurodiputado popular, José Manuel García-Margallo.

“Son miles las personas trabajadoras de nuestra comarca que llevan demasiado tiempo viviendo en una incertidumbre permanente sobre su futuro laboral y que merecen de sus gobernantes una buena noticia y la certeza de que podrán afrontar su futuro con seguridad jurídica y económica”, sostiene el secretario General de CCOO en el Campo de Gibraltar, Manuel Triano.

El dirigente sindical ha animado "a los gobiernos de España y Reino Unido a suscribir un acuerdo que permita la supresión de paso fronterizo y que propicie la colaboración socioeconómica de ambas comunidades en el marzo de la prometida zona de prosperidad compartida".

CCOO no oculta su "preocupación" y su "indignación" por las actitudes que protagonizan en las últimas semanas "algunos responsables políticos de la derecha, eurodiputados, senadores o consejeros, poniendo pegas a la firma del tratado; y que ha tenido el principal exponente en las declaraciones del exministro Margallo".

“La ciudadanía de la comarca merece tener buenas noticias en el asunto de Gibraltar, y estas no pueden venir de la práctica política de exministros como Margallo, que condenó a miles de trabajadores transfronterizos a soportar horas de colas a merced de los elementos para volver a sus casas. Ya conocemos lo que este señor ofrece a nuestra comarca; que nos deje prospectar otras vías más acordes con las alturas de la historia en la que nos encontramos”, aseveró Manuel Triano.

Este sindicato sostiene la necesidad de que el Campo de Gibraltar puada "dejar atrás la políticas de confrontación que tan negativos resultados ha tenido en ciudades como La Línea, para poder transitar nuevos caminos de cooperación sincera entre ambas comunidades".